Mantente erguido y sonrie.

viernes, 11 de septiembre de 2015

tres.

El tiempo pasa y casi se me olvida.
Casi se me olvida que hoy es hoy.
Que hoy es cuando te fuiste.
Que te fuiste pronto y eso nos puso tristes.
Como me pone triste pensar que te olvido, que te fuiste una vez de golpe pero que
en realidad te estas yendo a diario. 

miércoles, 9 de septiembre de 2015

Inspo 08.




Ser lo que somos y convertirnos en lo que somos capaces de ser es la única finalidad de la vida - Robert L. Stevenson






















________________
Antes de desaparecer en agosto guarde muchas -muchísimas- fotos y un mes más he hecho la selección. Es un post que nunca me canso de publicar, llamadme pesada.

domingo, 6 de septiembre de 2015

PIN incorrecto. SIM bloqueada.



He pasado agosto desaparecida. De hecho, he estado tan desconectada que he tenido que llamar a mi compañía telefónica para que me den el PUK del móvil, después de tres intentos fallidos al meter el PIN.

Apagada. Totalmente desconectada. Fuera de servicio.

Ahora me llueven los mensajes, porque aunque intente alejarme del mundo el mundo me sigue queriendo. Y aunque tengo el ceño fruncido y no quiero volver a la conexión, lo cierto es que me alegra saber que importo.

Me debato entre deshacer la maleta o pulular por la casa descalza, con los rizos alborotados y cara de "no quiero volver a empezar". El sol entra levemente y con la inocencia que me caracteriza abro la ventana esperando que me acaricie y caliente la piel, como durante esas mañanas de verano desayunando en la terraza mirando el mar.  Pero no, porque aquí la temperatura ya ha empezado a bajar preparándonos para el otoño, y aunque es mi estación favorita aún no me apetece; demasiado pronto para dejar atrás mi pelo rubio a causa del sol, el tacto de la arena en los pies o las idas y venidas arrastrando maletas.

Vuelvo el mismo día que el año pasado y los recuerdos de este mes se agolpan con los del verano anterior mezclándose, entrelazándose e, inevitablemente, comparándose.

Una catarsis de sentimientos.

Y vuelven los recuentros con algunos de los de antes y con los de ahora.

Y vuelve septiembre, como siempre pero como nunca antes.

Y vuelvo yo, pero sin volver del todo.

Porque 365 dan para mucho.

Para todo, salvo aprender a acostumbrarse a la rutina.